Cada año, la temporada de San Valentín en Colombia supone un reto para los diferentes actores que participan en la producción y logística del envío de flores. El total anual de la exportación aérea en el país es cubierto en un 88% por las flores enviadas alrededor de 100 destinos en el mundo. Asocolflores lidera y coordina a diversos sectores del país en el Plan Pétalo, una estrategia logística que tiene como objetivo la efectiva exportación de alrededor de 600 millones de tallos de 1.600 variedades con destino principal la ciudad de Miami en los Estados Unidos. Lo anterior traduce en una operación 3 veces mayor comparada con los envíos en temporada normal, según datos de USDA (United States Department of Agriculture)
Estados Unidos recibe desde Colombia un 78.3% del total de su importación de flores, lo que permite a las rosas y a los bouquet colombianos tener una participación en el mercado estadunidense del 54% y 86% respectivamente. El Plan Pétalo de Asocolflores permite la coordinación de entidades estales como la Policía Nacional, el ICA, la DIAN y la AercivilL; concesionarios como OPAIN y Airplan y entidades privadas como Alaico, agencias de carga, operadores de carga aérea y aerolíneas; con el fin de prevenir la contaminación y robo de la carga de flores de exportación en el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá.
“En esta oportunidad la fecha de San Valentín se celebrará un jueves, lo que es positivo, teniendo en cuenta que entre miércoles y viernes hay una mayor demanda de compra en los Estados Unidos. Por otro lado, el impacto que genera una fecha como estas en nuestro sector es importante, de hecho
se generan al rededor de 18 mil empleos adicionales por San Valentín”, afirma Augusto Solano, Presidente de Asocolflores.
Diversidad , la mayor ventaja de Colombia
La posición geográfica de Colombia juega un papel fundamental para el plan de exportación anual. A diferencia de otros países productores, la inmensa variedad de las flores colombianas (tamaños, colores y especies) y el clima ideal que durante los 12 meses del año permite cultivar productos de calidad satisfacen la demanda de los diferentes mercados internacionales.
Gracias a esto, el sector floricultor representado por Asocolflores y su nueva marca Flores de Colombia® puede explorar oportunidades de negocio en nuevos mercados internacionales con el fin de diversificar la exportación de flores colombianas y lograr un mayor estimulo en el consumo de flores en consumidores de todo el mundo, objetivo compartido por todos los exportadores de flores.
“La diversidad es nuestro territorio de marca, y queremos seguir construyendo sobre él, de tal forma que sigamos inspirando el mundo con las más de 1600 variedades que llevamos a diferentes continentes”.
Flores social y ambientalmente responsables
En Colombia, el sector floricultor aporta 140 mil empleos formales al agro y al sector productivo del país. El 100% de los trabajadores vinculados a empresas miembro de Asocolflores gozan de contratos formales de trabajo, beneficios de cobertura universal de salud y prestaciones sociales.
Asocolflores desarrolla programas de responsabilidad social en todos los municipios en donde tiene presencia el sector floricultor. Junto a las empresas miembro de la Asociación se ha trabajado en estrategias que permitan a los trabajadores y sus familias acceder a beneficios relacionados con vivienda, educación, recreación y deporte, a la vez que se construye un perfil de comunidad solidaria y participativa.
Entre los programas destacados de la Asociación se encuentran:
1. Asocolflor-es-hogar ha facilitado la obtención de beneficios para 29 mil familias con el fin de adquirir una vivienda propia, lo que constituye la realización de logros de muchos de los trabajadores.
2. Cultivando Futuro promueve estímulos educativos mediante la entrega de becas con cobertura del 100% de los gastos universitarios de los hijos de trabajadores con rendimiento académico sobresaliente.
3. Cultivemos la Paz en Familia desarrolla con los empleados habilidades para la solución de conflictos utilizando la creatividad, la colaboración y la paz como herramientas fundamentales.
En las regionales de Centro Occidente y Antioquia se trabajan programas específicos en formación técnica de pequeños productores en 60 predios con los que se logra un cambio positivo en prácticas sociales y ambientales. Adicionalmente, se realizan procesos de alfabetización que facilitan la graduación en primaria y secundaria de trabajadores del sector, beneficiando a más de 3.500 trabajadores de la floricultura.
Flores sostenibles con el sello Florverde Sustainable Flowers
Por más de 20 años esta iniciativa ha fortalecido las capacidades de todos los actores involucrados en la producción y comercialización de flores y ornamentales en Colombia para garantizar que la actividad económica se desarrolla de manera sostenible y con estándares de alta calidad.
Gracias al monitoreo de plagas, buenas prácticas, controladores biológicos y las aplicaciones de bio insumos, el uso de pesticidas químicos en la floricultura se ha reducido en 43% en 20 años. El 44% del agua para el riego de los cultivos proviene de la lluvia. En 2016, 102 fincas miembros de Asocolflores midieron su huella de carbono en Colombia, de las cuales 26 ya compensan el total de sus emisiones.
Florverde® Sustainable Flowers sella un compromiso de la floricultura con su entorno, sin dejar de ser eficientes en la producción. Este sello se nutre día tras día del análisis y trabajo continuo con los productores en diversas áreas de oportunidad. La evaluación y el otorgamiento de la certificación Florverde® Sustainable Flowers es realizado por organismos de certificación independientes y acreditados internacionalmente como lo son Icontec, SGS y NaturaCert.
El 40% de las flores colombianas exportadas cuentan con este sello de certificación. Florverde® permite la homologación o el reconocimiento mutuo con otros sellos como GLOBALG.A.P y Rainforest Alliance Certified y con códigos internacionales como ETI de Reino Unido, permitiendo así el acceso a nuevos mercados en el mundo. Actualmente, el sello hace parte de la canasta de estándares FSI de Holanda.
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